Al principio, todo era una fiesta. Una aventura, un descubrimiento. Se conocieron en aquel cumpleaños. Lo típico: tenías amigos comunes y, aunque el piso del cumpleañero estaba atestado, vuestras miradas no paraban de cruzarse. Se dieron los teléfonos y, tiempo después, quedaron a solas. Una vez y otra. Y otra. Conocieron mil lugares, se la pasaban genial e incluso hasta probaron las 100 posturas del kamasutra. Ahora llevan ya varios años juntos y, de un tiempo a esta parte, has empezado a notar que algo ha cambiado. Bueno, todo esto es un escenario ficticio, evidentemente, así que vamos al grano.

Sí, la pasión ya no es tan fuerte y eso es natural, pero hay algo más. Pequeños gestos, señales, actitudes. Tonterías no tan tontas que te llevan a pensar que se está desenamorando de ti. Y como la mejor forma de atajar el problema es ponerle nombre, aquí tienes un listado de señales que indican que tu pareja está dejando de quererte y las reflexiones sobre lo que podrías hacer, por si te inspiran para dar algún paso (ve fichando ya, por si acaso, estos trucos efectivos para olvidar a tu persona, que nada te pille desprevenida).

El entusiasmo ha desaparecido

¿Dónde quedaron aquellos recibimientos escandalosos cuando volvías a casa? ¿Y esos pequeños detalles que te alegraban el día? Lo más que recibes ahora es un escueto y frío ‘qué tal’.

Evita hacer planes contigo

Siempre está ocupado o tiene cosas que hacer. O está cansado. O se encuentra mal. Aunque el dolor y la fatiga desaparecen cuando las propuestas vienen de fuera de vuestro núcleo común.

No te incluye en los suyos

El tercer paso, derivado de los dos anteriores. Quizá tú le estés proponiendo algo que, hace un tiempo, hubiera sido un plan perfecto para los dos, pero se escabulle apelando a su ‘apretada agenda’ en la que tú no estás incluida.

¿Contacto físico?

Él, que siempre ha estado dispuesto para el sexo, ahora únicamente te busca para eso. Pero notas cómo el cariño y la dedicación ha decaído y vuestras noches de pasión tienen de todo menos pasión.

No le importan tanto tus problemas

Ser apoyo, sustento, refugio. Su hombro ha dejado de estar disponible para ti. Es más: cada vez que intentas implicarle y buscas en tu persona consejo o simple consuelo, ella se dedica a banalizar tus problemas. A tratarte de loca. A no darle importancia a lo que para ti sí es realmente importante.

Hay muchos reproches

Y peleas. Y encontronazos. Parece que todo lo que haces le molesta o le viene mal, y convierte tus actos en argumentos para atacarte. Parece claro que está buscando excusas en tu comportamiento para justificar su distancia y su desapego.

Los planes de futuro ya no son un tema excitante

Antes pasaban las horas imaginando vuestros viajes, la casa que se comprarian… Pero ahora, todo lo que tiene que ver con un futuro juntos parece darle alergia y corta las conversaciones de forma abrupta. No quiere salir a cenar, como para ponerse a pensar en un hipotético plan a largo plazo. Pues esta persona se está perdiendo, entre otras cosas, viajar contigo.